Teide 360 ha definido una década en el ciclismo de montaña en Canarias... hasta tropezar con la burocracia
Teide 360: El desafío ciclista que define una década
La Tenerife Teide 360 es una prueba de ciclismo de montaña de larga distancia que ha ganado relevancia en el ámbito deportivo y turístico de Canarias. Sin embargo, en las últimas ediciones ha enfrentado desafíos significativos debido a la gestión del Parque Nacional del Teide. A continuación, se presenta una recopilación de información documentada y contrastada sobre la evolución de la prueba, su impacto, los beneficios del deporte de aventura y una crítica a la postura del director del parque nacional y su equipo.
Evolución y Trayectoria de la Tenerife Teide 360
La Tenerife Teide 360 es una prueba no competitiva de gran fondo en modalidad de ciclismo de montaña, que recorre aproximadamente 130 km con un desnivel acumulado de 3.700 metros. Su objetivo es dar la vuelta al Teide en una sola etapa, permitiendo a los participantes disfrutar de un entorno natural único. La prueba se celebra anualmente y ha contado con la participación de hasta 1.200 ciclistas en sus ediciones más recientes
Los recorridos incluyen tramos por pistas de tierra en estado aceptable, caminos que requieren descender de la bicicleta y algunos tramos de carretera asfaltada. La organización establece normas estrictas para preservar el entorno, como la prohibición de arrojar basura durante el recorrido.
Impacto y Beneficios del Deporte de Aventura
La Tenerife Teide 360 ha demostrado ser un motor económico y social para la región. La prueba atrae a participantes locales e internacionales, generando ingresos para el sector turístico y comercial de Tenerife. Además, promueve la práctica deportiva y el respeto por la naturaleza, al tiempo que destaca la belleza del Parque Nacional del Teide.
La organización de la prueba ha implementado medidas para garantizar la seguridad y el bienestar de los participantes, incluyendo asistencia sanitaria, avituallamientos, asistencia mecánica y vehículos de apoyo . Estas acciones reflejan un compromiso con la calidad y la sostenibilidad del evento.
Desafíos con la Administración del Parque Nacional del Teide
A pesar de los esfuerzos de la organización, la Tenerife Teide 360 ha enfrentado obstáculos debido a la postura del director del Parque Nacional del Teide y su equipo. En ediciones anteriores, se han producido restricciones de acceso y cambios en el recorrido que han afectado la experiencia de los participantes. Estas decisiones han generado críticas por parte de la comunidad ciclista y organizadores, quienes consideran que no se ha promovido un diálogo constructivo ni se han buscado soluciones colaborativas.
La falta de personal en el parque también ha sido un tema de preocupación. Con solo unos pocos agentes forestales para vigilar y controlar más de cuatro millones de visitantes anuales, se ha señalado la necesidad de aumentar la plantilla para garantizar una gestión efectiva del espacio natural.
Crítica a la Postura del Director del Parque Nacional
La actitud del director del Parque Nacional del Teide y su equipo ha sido percibida por muchos como inflexible y carente de disposición al diálogo. En lugar de colaborar con los organizadores de eventos como la Tenerife Teide 360, se ha optado por imponer restricciones que limitan el potencial de la prueba y su contribución al desarrollo local. Esta postura ha sido criticada por su falta de visión y por no reconocer los beneficios que el deporte de aventura puede aportar a la conservación y promoción del parque.
Es esencial que las autoridades competentes adopten un enfoque más abierto y colaborativo, que permita la coexistencia de la conservación del medio ambiente con el fomento de actividades que promuevan el turismo sostenible y el bienestar de la comunidad. La Tenerife Teide 360 es un ejemplo de cómo el deporte puede ser un aliado en la preservación y valorización de nuestros espacios naturales.
Corremos el riesgo de perder uno de los mejores activos deportivos de la isla y de Canarias
La Tenerife Teide 360 es una prueba que ha demostrado su valor como evento deportivo y motor económico para Tenerife. Sin embargo, los desafíos derivados de la gestión del Parque Nacional del Teide han puesto en evidencia la necesidad de una administración más abierta al diálogo y a la colaboración con los organizadores de eventos.
Es fundamental que se reconozca el potencial del deporte de aventura como herramienta para la conservación y promoción de nuestros espacios naturales, y que se busquen soluciones conjuntas que beneficien tanto al medio ambiente como a la comunidad.
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