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Roban 80 bicicletas de alta gama en la tienda LTM Racing de Madrid

La mañana del lunes día 5 de octubre se convirtió en la peor de 25 años de trayectoria de la empresa familiar LTM Racing, una tienda de ciclismo de San Sebastián de los Reyes, en Madrid. LTM Racing se fundó hace 25 años por los responsables de Bike Comp, distribuidores de la marca Santa Cruz para el mercado español. Empezaron como un pequeño negocio en el centro de Madrid hasta que en 2013 se mudaron a un local de 500 metros cuadrados y ya en 2017 se ubicaron en la actual nave de 1.000 metros. Al abrir la tienda el personal y propietarios la encontraron vacía, con un agujero enorme en la pared, de aproximadamente dos metros cuadrados que daba a la nave industrial que queda justo al lado y por el que habían sustraído 80 bicicletas de gama alta de las marcas Yeti, Ibis, Santa Cruz y otras marcas, además de mucho material. Cuadros de carbono, horquillas, cascos y prácticamente todo lo que encontraron en la tienda. La policía calcula que los ladrones, al menos 3 personas, abrieron el butró

¿Cuánto cuesta una ebike? Modelos y precios en 2021

Si sueñas con tener una ebike seguramente uno de los frenos que están impidiendo que acudas corriendo a la tienda y te la compres es el precio.


  • ¿Son 3.000 euros suficientes para comprar una eBike?

  • ¿Es necesario pedir un préstamo como si fueras a comprar un coche?

  • ¿Está justificado los precios de las eBikes actualmente?

  • ¿Las ebikes económicas, lo son porque son malas?





Bicicletas musculares


La prensa está empezando a diferenciar las bicicletas eléctricas de las bicicletas sin asistencia eléctrica denominando a estas últimas como bicicletas musculares o pulmonares.


A mí juicio personal, y después de haber probado varias, esto genera una falsa impresión sobre las ebikes que simpatiza con los que se resisten al cambio. Después de todo el ciclismo es un deporte que tiende a ser más conservador que innovador. La asistencia eléctrica, lo que consigue, es aplanar los picos de esfuerzo, allanar las pendientes, por así decirlo, decidiendo el ciclista “cuántos grados” quiere bajar el esfuerzo. Pero el esfuerzo muscular sigue estando ahí.


De hecho, ciclistas noveles, principiantes y globeros van a descubrir con sorpresa que harán más ejercicio, se mantendrán más en zonas de entrenamiento interesantes y con pulsaciones más altas, que en sus antiguas bicicletas sin asistencia. ¿Por qué? Porque el cansancio se regula mejor, por lo que hay menos paradas de recuperación porque los picos de esfuerzo no son tan elevados, por lo tanto los tiempos durante los que se realiza el ejercicio entre pausa y pausa son más largos. Simple y eficaz.


El crecimiento de las ebikes


El crecimiento imparable del mercado de las bicis eléctricas no es consecuencia directa de la situación actual de la pandemia. El confinamiento, las restricciones de movilidad, la necesidad de mantener la distancia social solo han catapultado lo que ya era una tendencia obvia que se venía observando en los tres últimos años, al punto que ya en 2019 muchas marcas ofrecían más modelos de bicicletas eléctricas que bicicletas tradicionales, sin asistencia.


La Asociación Española de Marcas y Bicicletas de España, AMBE, que aglutina a 38 empresas del sector que representan aproximadamente el 54% de la actividad comercial del gremio en este país, informó que se vendieron 1.260.000 bicicletas durante 2019 de las que casi 143.000 unidades eran eléctricas. Eso representa un 11% del total durante el año.


Con respecto al año anterior, 2018, las ebikes se vendieron un 28% más. Solo las bicicletas infantiles crecieron más en ventas mientras que las bicicletas de montaña solo crecieron un 16% en sus ventas. La tendencia es clara, el mercado de las ebikes crece. Y crece a pasos agigantados. Pasos que se han visto impulsados por la situación actual de la pandemia.


Cuánto cuesta una ebike


Según AMBE, el precio medio pagado por una ebike en 2019, en España, fue de 2.400 euros. Más del triple que el precio medio pagado por una bicicleta de montaña tradicional, que fue de 700 euros aunque no tan lejos del precio medio pagado por los ciclistas españoles en 2019 por una bicicleta de carretera o ruta, que fue de 1.800 euros.


El factor de entrada de los ciclistas al ciclismo eléctrico es, pues, una cuestión de precio. Con el crecimiento de la demanda y el nivel de competencia actual (todas las marcas están apostando por las ebikes) es muy probable que ocurra como en el ciclismo tradicional, que los precios se distribuyan en gamas bajas, medias y altas, dando así acceso a este mercado a un mayor rango de clientes.


Un ejemplo, la Rockrider E-ST 100 con ruedas de 27,5 vendidas por Decathlon, que cuestan 999€ en su tienda online. La mayoría de sus modelos, rígidos, se sitúan por debajo de los 2.000 euros, muy por debajo del precio medio pagado en 2019. Mientras que su modelo más caro, la doble suspensión Lombardo Stilus All Mountain, también con ruedas 27,5, tiene un precio de 3.319€ en su tienda online. (Recuerda que una cubierta 27,5 plus -de 3.25 de ancho- tiene un diámetro exterior casi equivalente a una 29 de 2.25 de ancho.)


Según AMBE el 80% de los compradores de ebikes acuden a tiendas especializadas mientras que solo un 20% acude a grandes superficies o tiendas genéricas de deporte. A mi juicio este porcentaje estaría viciado si AMBE solo toma como fuente a sus asociados.


El peso se paga muy caro


La Orbea Keram tiene un precio entre 2.200 y 3.000 euros, que es la ebike de entrada en la marca, rígida y con cuadro de aluminio hidroformado tipo 6061. Mientras que la Wild-FS de Orbea, su ebike doble suspensión, tiene un precio entre los 7.300 y los 9.300 euros. Obviamente hablamos de cuadros de carbono.


Si nos vamos a Trek sus precios, para bicicletas de montaña, se van entre los 2.800 euros de su Powerfly 4, también en aluminio y montaje estándar de gama media hasta los nada despreciables 12.000 euros de la Rail 9.9 X01 AXS, en cuadro de carbono y componentes de gama alta y con un peso total de 22,5 kilos para la talla M. La diferencia con la Powerfly 4 de 2.800 euros es solo de 2 kilos menos.


Y así podríamos seguir y seguir. Los precios de Lapierre están entre los 3.000 de la Overvolt 3.5, doble suspensión, aluminio, y la curiosa configuración de la Overvolt GLP 2 Team de 8.500 euros, en carbono.


Como podemos observar todas las marcas siguen dos caminos, aunque con excepciones. Por un lado, cuadros de aluminio, rígidas y montajes de gamas medias, con precios entre los 2.000 y los 4 ó 5.000 euros. Y por otro lado, cuadros de carbono, dobles y montajes de gamas altas con precios que superan los 5.000 euros.


Pero como en estas bicicletas lo que suma es el motor, ya sea Bosh, Shimano o Pollini, pero sobre todo la batería, al final la diferencia de peso entre una ebike de carbono y una ebike de aluminio se sitúa en los 2 a 4 kilos, estando la mayoría por encima de los 20 kilos de peso.


Las prestaciones se pagan


Muy pocas bicicletas, como la Crafty Carbon de Mondraker o la S-Works Turbo Levo SL de Specialized, bajan de los 20 kilos de peso, en doble suspensión. Además con un estilo de diseño muy delgado, batería integrada y un montaje de componentes espectacular. Pero, obviamente, hablamos de precios que pivotan alrededor de los 12.000 euros.


Volviendo a la Orbea Keram, los casi 800 euros de diferencia entre la Keram 30 y la Keram Max se van en si quieres una horquilla Suntour de 100mm o una horquilla Marzocchi de 110, en si quieres una piñonera Deore 11-46 de 10 cambios o una Sun Race 11-51 de doce cambios. Y así, todo. Mismo cuadro e incluso algunos componentes como frenos, cadena, tija de sillín, son los mismos solo que distinta gama (inferior o superior).


Pero esto es algo que reproduce el mercado de bicicletas tradicionales. Sobre una misma base (cuadro) puedes elegir bajar peso y mejorar prestaciones subiendo en la gama de los componentes y haciendo, por supuesto, un mayor desembolso de precio.


La marca se paga


La diferencia de precios entre las grandes marcas, o de mayor prestigio, en características similares, no andan muy lejos, con precios que están entre los 2.000 de la Orbea Keram y los 12.000 euros de la Crafty Carbon de Mondraker.


Hay un consenso generalizado en el precio de 3.000 euros. Una especie de barrera psicológica. Las bicicletas de montaña más básicas se acercan a este precio y a partir de ahí, lo que quieras. Tienes que ir a conceptos de ebikes de cicloturismo para ver en marcas como CUBE precios por debajo de esa cifra. Hablo de conceptos como la Nuride, que es una bicicleta de paseo para caminos y pistas o la Cross Pro 500 All Road, una todo camino de cuadro rígido, pensada para el ciclismo urbano.


Aquí nos movemos, para CUBE (y en otras marcas ocurre algo similar), en precios que van entre los 2.000 y los 2.800 euros aunque rápidamente vuelven a superar la barrera de los 3.000 en cuanto mejoran sus componentes o dan el salto a un cuadro de carbono.


Decathlon, con sus Rockrider eléctricas, tiene una oportunidad enorme para volver a hacer lo que hace siempre, un producto de calidad, con unos acabados más que satisfactorios, a unos precios por debajo de los marquistas especializados, ya que prácticamente todos sus modelos se sitúan por debajo de los 2.000 euros (según su tienda online).


Por ahora, el mercado de bicis eléctricas económicas, por debajo de los 2.000 euros e incluso por debajo de los 1.000 euros, se sitúa en las bicis urbanas. En Amazon también encontrarás bicis eléctricas de marcas desconocidas con precios asequibles. Alguna está apareciendo en AlCampo o Carrefour. Y me imagino que en El Corte Inglés se pondrán las pilas.


¿Cuál es la opción más barata?


Sin duda, las opciones más baratas son las bicicletas chinas compradas en Amazon, en tiendas genéricas o en grandes superficies, sin embargo, salvo que quieras tu bicicleta eléctrica para circular por tu ciudad, ir al trabajo o a comprar pan, desde luego no te recomendaría esta opción. ¡En absoluto! Sobre todo si estás pensando en un uso más intenso, ya sea lúdico, para hacer cicloturismo, o deportivo.


Para acceder a una ebike que te dé confianza, a mi juicio y en el momento actual, la solución pasa por indagar en las marcas más populares como Orbea con las Keram, Trek con la Powerfly, Spelialized con la HardTrail, Giant con las Fathom y las Talon. Por varios motivos, porque tienen modelos de ebikes con precios entre los 2.000 y los 3.000 euros y porque es más fácil acceder a un servicio técnico. E incluso para venderlas de segunda mano no debería resultarte demasiado complicado.


Sin duda alguna, si buscas una opción accesible con unos mínimos de garantías de calidad y tienes un Decathlon cerca de casa, no se te ocurra comprar nada si antes pasarte por esta gran superficie deportiva y echar una visual a las opciones que tienes.


¿Cuál es la ebike más cara?


Obviamente, ya sea porque te vas a endeudar ya que es tu sueño o porque te sobran 12.000 euros que tienes ociosos en una cuenta bancaria, pero en todo caso porque es tu decisión y se respeta, una doble suspensión con cuadro de carbono y componentes de gama alta son tu opción y el precio que vas a pagar no bajará, posiblemente, de los 8.000 euros.


Y apurando, apurando, si quieres bajar de los 20 kilos de peso, te irás a precios por encima de los 10.000 euros. Seguramente la Crafty Carbon de Mondraker o la S-Works Turbo Levo SL de Specialized.


¿Cuánto debo gastarme en una ebike?


Dicho todo lo cual si te vas a plantear en serio la adquisición de una ebike de montaña con una calidad media, un peso que no se aleje de los 20 (por encima, claro está) y menos aún se acerque a los 30, con unos componentes ya probados en cuanto a calidad y solidez en el ciclismo tradicional, prepara un presupuesto entre 3.000 y 4.000 euros.


O, espera unos años a que la tecnología se abarate, el mercado se sature y popularice y la competencia entre los marquistas crezca (ahí, seguro, bajan los precios).


O, recurre al mercado de segunda mano, que empezará a crecer seguramente durante 2021, poniendo cuidado en la calidad de lo que compras y, sobre todo, en que no sea una bicicleta robada. Te recuerdo que comprar objetos robados es un delito penal.


Si tu opción es la del común de los mortales, pedir dinero, el peso para tu economía familiar estará, para unos 3.500 euros de préstamo, sobre los 122 euros mensuales (pagando en 41 meses y un desembolso total de casi 5.000 euros) y los 315 euros mensuales (pgando en 13 meses y un desembolso total de casi 4.000 euros). Es un factor muy importante a tener en cuenta.


Ahora bien, si (1) lo puedes hacer, (2) lo quieres hacer, (3) le vas a sacar partido porque le vas a dar uso y (4) sabiendo la felicidad que te aportará… ¡Adelante! ¡No te lo pienses más!


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Hasta la próxima, chiquillos.

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